La segunda mano está en alza
enfriamiento de la demanda en nuevas promociones.
Tras los últimos dos años de frenética actividad en el mercado de compraventa inmobiliario, el pasado Marzo las operaciones cayeron un 5,7% interanual, coincidiendo con la subida de tipos de interés y el encarecimiento de las hipotecas.
Viéndose afectado el mercado de la vivienda nueva con un 7,5%, respecto a un 5,3% de la segunda mano.
Estos datos se ven reflejados en el INE (Instituto Nacional de Estadística) en el que presume que el 18,8% de viviendas tramitadas en los meses posteriores por compraventa son nuevas, frente al 81,2% usadas.
A pesar de la situación, las 56000 viviendas vendidas en marzo superan la media mensual del año pasado. << A pesar del encarecimiento de la financiación, el volumen de viviendas vendidas sigue siendo muy alto >>, nos dice Francisco Iñareta, portavoz del portal Idealista, que atribuye las causas a que los nuevos compradores carecen de necesidades financieras ya que poseen otros inmuebles, a lo que se le suma la lucha comercial entre las grandes entidades financieras << que siguen ofreciendo en ocasiones préstamos mixtos y fijos por debajo del Euribor >>.
Aunque las primeras advertencias de la ralentización del mercado se empezaron a proyectar a finales del año anterior, la tendencia a la baja se consolidó en el primer trimestre, sin llegar al desplome total en ninguno de los casos.
<< Hay que destacar la gran capacidad de resiliencia que muestra el sector, al sobrellevar el cambio en la política monetaria y evitar una brusca alteración en el mercado. La transformación está siendo suave y paulatina >>, se pronuncia María Matos, directora de Estudios de Fotocasa. Expone que, a pesar del auge inmobiliario de obra nueva desde la pandemia, en la que los nuevos propietarios compraron sobre plano, el mercado se ha visto afectado por la problemática subida de precios en la que materiales y logística se en encarecidos brutalmente, advirtiendo que la demanda solvente se ha visto arrastrada a al mercado de la segunda mano.
Aunque la intención de compra prosigue actualmente, se vaticina que empiece a moderarse en los próximos meses, en comparación a los datos obtenidos de los dos últimos ejercicios, ocasionado por el impacto de la subida de tipos de interés.
Esto lo justifica con un efecto cadena en el que la inflación ya afecta en los hogares españoles y a su capacidad de ahorro, por lo que la compraventa de inmuebles se verá afectada a posteriori.
Los estudios realizados concluyen que las previsiones para el 2023 serán inferiores respecto al año anterior, dependiendo de la evolución de la inflación y del camino que tome la política de tipos del Banco Central Europeo (BCE), en concreto las subidas del Euríbor y la incertidumbre hay en el ambiente inmobiliario con respecto a la nueva ley de la vivienda.
Redacción